Es imposible no deprimirse con la situación que viven diariamente las madres venezolanas en el país. Uno de esos escenarios tristes, se vio este miércoles 10 de agosto en el centro de Barquisimeto, donde las colas fueron protagonistas de la violencia sin importar que se tratara de mujeres con sus bebés en brazos, quienes suplicaban para poder entrar a comprar pañales en el comercio Royal Center, así lo explicó Maria Fernanda Peñalver para El Impulso.
“No se salga señora, aguante la pela”, fue una de las frases del día de ayer, cuando las mujeres se abrazaban una a las otras para evitar ser sacadas de las filas.
Foto: El Impulso.
El desespero y la angustia se debían a algo tan simple, que en Venezuela se ha convertido en una odisea: la compra de pañales. Los cuales eran vendidos únicamente a las madres que ya habían dado a luz, dejando por fuera un número significativo de mujeres embarazadas.
Para más colmo, solo vendían un paquete de pañal por persona, a menos de que compraras un lavaplatos y te llevabas tres paquetes.
Como en casi todos los establecimientos a nivel nacional, el día anterior se había corrido el rumor de que llegaría el producto en ese local, por lo que las colas comenzaron a hacerse en el negocio desde la noche.
La policía del estado se encargó de “organizar” y supuestamente evitar la venta a “bachaqueros”, sin embargo los usuarios denunció que los funcionarios eran los principales abusadores.
“Ellos están aquí y que para ordenar, pero recogieron cédulas como les dio la gana, a las personas que conocen y ellos son los primeritos que pasan a comprar y salen con un poco de pañales”, expresaron.
Uno de los clientes rechazó que se jugara con la paciencia de las personas. “Mi esposa tiene cerca de dos horas esperando que la hagan pasar”, dijo.
Uno de los encargados del negocio habló con la gran cantidad de personas, que con la fuerza pretendían comprar. “Así se vengan toditos yo bajo la santamaría y listo, no compra nadie”, dijo el encargado.
Si todavía es uno de esos que no cree la situación que viven las madres venezolanas, y en general el ciudadano de a pie, le mostramos las fotos de la revuelta, donde caras de dolor y cansancio son la imagen principal de las madres, quienes cargan a sus niños llorando, constatando que esos ambientes no son los adecuados para los infantes.
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Foto: El Impulso.
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Con información de El Impulso