Pastor Maldonado tuvo un 2015 un tanto complicado, tomando en cuenta el arranque de temporada que tuvo y que hasta puso a dudar sobre la permanencia del criollo en el equipo Lotus, mismo que para 2016 pasará a manos de Renault.
Con la salida de Grosjean al equipo Haas, y el nuevo constructor que se une a la F1 (Renault), se abre un catálogo de retos al criollo con la escudería en la categoría reina del automovilismo. Los principales: terminar las carreras y sumar mayor cantidad de puntos.
Foto: El Universal
Si bien la fiabilidad del E23 fue la causante en algunos casos de que el maracayero se haya retirado en varias carreras en la temporada, el piloto debe afinar el olfato al momento de controlar su bólido, en donde adelantar y conseguir un mejor ritmo para superar las situaciones adversas que se le presenten en la pista.
La puntuación también ha sido otra deuda del criollo. Terminó con 27 puntos, 24 menos que su compañero Romain Grosjean. Esto es una consecuencia del poco rendimiento que tuvo en los circuitos, pero el hecho de terminar las pruebas no será suficiente, también la zona de puntos debe ser la meta.
El podio no es el principal norte. Pero sí le hace falta al equipo ver a sus representantes en la pista celebrando en lo alto y a Pastor ampliar su curriculum en la categoría.
El maracayero fue fichado por Lotus en 2014. Ya son dos temporadas con los británicos, y esta próxima zafra debe verse como la gran oportunidad para demostrar su potencial como conductor de F-1.
Vía: Agencias