Falta de divisas disminuye producción del sector automotriz. Los retrasos de Cadivi con el sector superan los 200 días y representan alrededor de 170 millones de dólares .
Los prolongados retrasos en la asignación de dólares de la Comisión de Administración de Divisas a la industria automotriz han obligado a las ensambladoras a trabajar por debajo de sus capacidades, afirmaron representantes del sector, que pidieron no ser identificados.
Mientras que pueden armar entre 60 y 70 vehículos diarios, actualmente sólo fabrican entre 40 y 45. “Desde hace unos meses comenzamos a disminuir deliberadamente la producción para ahorrar el poco inventario que tenemos. Si no lo hubiéramos hecho, probablemente ya tuviéramos la planta paralizada”, señaló una de las fuentes.
Las empresas calculan que los insumos les alcancen, por lo menos, hasta diciembre, pero agregan que no es seguro. “Eso es lo que esperamos. Cada una hizo los cálculos necesarios para lograrlo”, indicó otra fuente.
La deuda del gobierno con las ensambladoras, en promedio, pasa de 200 días y está en alrededor de 170 millones de dólares.
La falta de insumos, por el retraso en la liquidación de divisas oficiales, obligó a Toyota, cuya planta está en Cumaná, estado Sucre, a programar una parada. Entre el 28 de octubre y 11 de noviembre de este año la empresa detendrá el ensamblaje, tiempo en el que dejarán de armar 450 unidades, apuntó otra fuente de la industria, que también prefirió no ser mencionada.
“El 12 de noviembre prevén reanudar la producción en la planta de Toyota. La casa matriz, en Japón, negoció con los proveedores internacionales y se retomaron los despachos de mercancía, los cuales estaban parados por falta de pago”, señaló la fuente.
Problema generalizado. Además de la escasez de divisas para la importación del material de ensamblaje, las automotrices que operan en el país deben afrontar la falta de insumos nacionales.
Una de las fuentes afirmó que con frecuencia las empresas deben detener algunas líneas de producción entre tres y cinco días porque los proveedores venezolanos no les despachan a tiempo.
“Todas las piezas de un carro son indispensables, si falta una sencillamente no lo podemos fabricar. Hay días en los que no armamos ni un automóvil de determinado modelo porque nos falta una parte. Cuando la recibimos, incrementamos un poco, por unos días, la producción para contrarrestar los días que estuvimos parados”, dijo.
A comienzos de octubre, el presidente ejecutivo de la Cámara de Fabricantes Venezolanos de Productos Automotores, Omar Bautista, informó que la deuda del sector con los proveedores internacionales llegaba a 150 millones de dólares por el retraso en la liquidación de Cadivi. En lo que se refiere a los importadores de autopartes, la semana pasada el vicepresidente de la Cámara Nacional de Comercio de Autopartes, José Cinnirella, dijo que el compromiso de la industria con los vendedores extranjeros estaba entre 60 y 65 millones de dólares.
Las Cifras
– 30,69% bajó la producción de vehículos entre enero y septiembre de 2013, con respecto al mismo periodo del año pasado, según el último reporte de Cavenez.
– 70.000 carros son los que se prevén se ensamblen este año, alrededor de 36% menos de la meta que se planteó la industria en enero pasado.