Las últimas dos toninas que quedaban vivas en el acuario de Valencia dejaron de existir. La primera en morir era el macho de la manada: Zeus. Días después le siguió Dalila, la mayor del grupo de delfines de agua dulce.
Foto: El Estímulo.
Aún no hay reporte oficial de las causas de muerte de estos animales, pero, según fuentes extraoficiales, ambos animales podrían haber fallecido porque durante los últimos días estuvieron comiendo menos de lo que debían, por el peso de cada una.
En el 2011 ya habían muerto las 4 primeras de las 6. Se presume que otras de las causas fueron la falta de mantenimiento del estanque, puesto que las bombas de agua no funcionaban correctamente y no garantizaban que la calidad del agua fuese la ideal.
El médico veterinario Ernesto Boede, quien sirvió como asesor del acuario, desde 1986 hasta 2005, manifestó que en comparación al Sea World, de Orlando y San Diego en Estados Unidos, o el zoológico de Duisburg en Alemania, el de Valencia debe mejorar, “sin embargo no se puede decir que somos de los peores acuarios tampoco”.
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