El gobierno está cumpliendo con su promesa de despedir a los empleados públicos, que firmaron en contra del presidente Nicolás Maduro, esto sin importarle los derechos laborales, ni constitucionales.
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María Gabriela Subero es sobreviviente de cáncer de mama y se encuentra de reposo por presentar un linfedema en el brazo izquierdo como efecto secundario de su enfermedad, trabajó 23 años en la administración pública, cuatro en la prefectura de Caracas y 19 en el Seniat.
Aparte de su enfermedad, Subero es madre de un niño con deficiencia cognitiva leve, sin embargo esto no fue tomado en cuenta a la hora de despedirla por firmar a favor del Referendo Revocatorio, en contra del presidente Nicolás Maduro.
“Estoy en contra de la situación que estamos viviendo, mi familia está dividida, la tengo en el exterior. No gozo de libertad debido a la inseguridad y no conseguimos la comida (…) Me han pisoteado como les ha dado la gana”, manifestó Subero en una entrevista para El Nacional.
La profesional sostuvo que le quitaron el seguro médico, por lo que ahora deberá pagar una póliza para completar su tratamiento médico.
La afectada manifestó que va a ir a todos los entes que sean necesario para que le restituyan su derecho al trabajo.
Reveló que ya Introdujo un recurso de reconsideración al Seniat, pero no obtuvo respuesta. Luego acudió a la Asamblea Nacional y a la Defensoría del Pueblo.
“Recapaciten, no puede ser que nosotros seamos perjudicados por la sinvergüenzura de ustedes. Esto va a llegar hasta las últimas consecuencias”, fueron las palabras de Subero al gobierno.
Con información de El Nacional
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