El modelo socialista sigue demostrando ser un fracaso para los empresarios que buscan ser productivos y exitosos en Venezuela. Colgate-Palmolive Co reportó en su balance del último trimestre de 2015 haber asumido un cargo de $1.080 millones por un cambio en la forma en que asimila en sus cuentas los negocios en Venezuela, reseñó Reuters.
Las ganancia del grupo de productos de higiene y limpieza Colgate Palmolive, retrocedieron 36% en 2015 debido a una pérdida de 458 millones de dólares vinculada a sus operaciones en Venezuela.
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Pese a ello, el dividendo será de 2,81% según un comunicado de la multinacional publicado este viernes, por encima de los 2,79% que habían estimado los analistas.
El volumen de negocios fue de 16.030 millones de dólares con una disminución de 7% y por debajo de las estimaciones que planteaban 16,07 millones de dólares.
En el cuarto trimestre del año, las cifras de negocios del grupo pasaron a rojo con una baja del 7% en las cifras de negocios (3.900 millones de dólares), debido especialmente a una registro excepcional de 1.060 millones de dólares debido al cambio de la contabilización de sus actividades en Venezuela.
«En el futuro el grupo no incluirá más los resultados de sus operaciones en Venezuela en sus cuentas consolidadas», indica la empresa en un comunicado.
Solamente contabilizará los ingresos por las ventas de inventarios y las utilidades que genere su filial. Colgate, presente en Venezuela desde hace 72 años, tomó la determinación de reestructurar sus actividades en ese país.
La compañía dijo que ya no incluiría en su balance los activos y pasivos de sus operaciones en el país. Esta medida ya está siendo aplicada por otras transnacionales ante la imposibilidad de poder repatriar sus dividendos a sus casas matrices.
La compañía reportó ventas menores a las esperadas durante el último trimestre del 2015, afectadas por la fortaleza del dólar y la debilidad de la demanda en América Latina. En la región, sus precios subieron 13%, lo que generó una caída en los volúmenes de 4%.
La empresa, que obtiene más de tres cuartas partes de sus ingresos fuera de Estados Unidos, ha estado subiendo los precios para contrarrestar el impacto de la fortaleza del dólar, pero ha recibido un golpe en sus volúmenes en regiones como América Latina, su mayor mercado por ventas.