Desde el año 2013, Venezuela ha venido experimentado una terrible crisis económica, motivada por la caída de los precios del petróleo, la hiperinflación, la pérdida del valor de la moneda, entre otros.
Créditos: The Photographer / Wikipedia.
El nivel de la crisis no es cosa menor. De acuerdo con economistas entrevistados por The New York Times, sería la peor crisis económica en la historia de Venezuela y la peor desde mediados del siglo XX de un país que no está experimentando una guerra, más grave que la Gran Depresión en los Estados Unidos, y que la crisis hiperinflacionaria en Zimbabue de 2008-2009. Sí, el país en el que se creó aquel famoso billete de 100 billones de dólares zimbabuenses con el que apenas se podía comprar un pan.
Pero la situación de Venezuela no siempre fue así. Durante los años 1953 y 1957, durante la presidencia de Marcos Pérez Jiménez, la moneda nacional, el bolívar, se revaluaba constantemente, al punto que llegó a ser más fuerte que numerosas monedas extranjeras.
La situación económica era tan sólida y favorable que los consulados de Venezuela en países como España e Italia estaban repletos de personas de esas nacionalidades buscando visas para emigrar a Venezuela. Y es así como Venezuela, en ese entonces, recibió una importante ola migratoria proveniente de países de Europa.
El «Sueño Americano» se convirtió en el «Sueño Venezolano»
Los inmigrantes provenientes de Europa, devastada por la Segunda Guerra Mundial, se encontraron con que ninguna de sus monedas superaba el poder de compra del Bolívar, fortalecido por la masiva extracción y venta petrolera usada en el esfuerzo bélico.
Entre 1948 y 1961, ingresaron al país 920.000 inmigrantes, principalmente españoles, italianos y portugueses. Para entonces, Venezuela apenas contaba con entre 5 y 7 millones de habitantes.
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Diario El Vespertino
La fortaleza del bolívar durante la época de Pérez Jiménez es incuestionable, tanto en Venezuela como en los mercados mundiales, existiendo una estabilidad invariable de la moneda.
Este periodo se caracterizó por una mínima deuda externa y unas sólidas reservas en oro, cumpliendo el BCV con su función de darle fuerza al bolívar.
Venezuela era un país prometedor por su fuerte economía.
Fue tal la fortaleza económica del país en aquel entonces, que la revista norteamericana TIME nombró en el año 1955 a Marcos Pérez Jiménez como HOMBRE DEL AÑO, siendo su rostro la portada de la revista por ese mes “EL HOMBRE TIME”.
Time
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