Varios fetos y el modelo médico anatómico del esqueleto humano (considerado una reliquia) del Laboratorio de Química, así como equipos tecnológicos, fueron robados durante la madrugada de este sábado del Colegio María Auxiliadora, en la carrera 15 con calle 41, cerca del Parque Ayacucho en Barquisimeto, situación que causó indignación en la comunidad docentes y alumnos que llegaron al lugar para repudiar la acción delictiva.
La directora de la institución, sor Yurirma Gil, lamentó el robo e informó que en la mañana de ayer, cuando hacía el respectivo recorrido, se sorprendió al ver que algunas áreas del plantel habían sido alteradas. En ese momento se dio cuenta que teléfonos, tres computadoras portátiles modelo Canaima, dos proyectores de videos, un monitor, teclado y router, fueron sustraídos. De acuerdo a versiones de vecinos, en la zona hay poco patrullaje y la inseguridad se apodera en horas nocturnas. 
Sobre el hecho
Aunque corresponde a las autoridades policiales esclarecer cómo ocurrió, se presume que entre las tres y cinco de la madrugada, un grupo de delincuentes subió al primer piso, escalando la pared frontal del colegio, específicamente al salón de 5to. año, donde cortaron una ventana de metal y diseñaron un espacio por el cual solo personas de contextura delgada pueden pasar. Por allí, salió lo robado, aunque tres microscopios guardados en sus cajas de madera e implementos deportivos y papelería fueron dejados en esa zona (por el tamaño de los mismos era casi imposible sacarlos por la abertura dispuesta por los antisociales, pues todo estaba en bolsas plásticas).
El material que ahora está en manos de los delincuentes estaba en dirección, coordinaciones y laboratorio, donde todo quedó desorganizado, producto del desespero con el cual cometían el hecho.
De análisis
Si bien en el colegio existen cámaras de seguridad, la última grabación obtenida fue el pasado 28 de agosto. Desde esa fecha, solo los aparatos servían para ver hacia las entradas: tanto la principal como la del estacionamiento.
Curiosa realidad porque el centro de control debe ser manipulado por especialistas que dominan software de video, pero ayer, al revisar, no habían evidencias, dijo un experto que verificó los equipos.
Otra situación que invita a la reflexión, es que durante la noche del viernes y amanecer del sábado, un sonido a alto volumen fue colocado en una fiesta que se realizó en una invasión detrás de la institución, lo que haría imposible que las hermanas escucharan cualquier ruido.
Uniformados del Cicpc ya tienen conocimiento, luego de la denuncia realizada por sor Yurirma Gil, y la posterior visita de estos al colegio.
Información del diario La Nación.