Un estudio, basado en 1.200 entrevistas realizadas por el Instituto Venezolano de Análisis de Datos entre el 28 de mayo y el 11 de junio de 2015, revela que la oposición ocupa el primer lugar de preferencia con 32,6%, mientras que 27,6% del electorado se inclina por candidatos independientes ante las próximas elecciones parlamentarias del 6 de diciembre y el chavismo queda relegado al tercer puesto, con 20,8%. Mientras que el resto se declara indeciso.
Si se polariza la intención de voto entre opositores y chavistas, el primer grupo subiría a 41,8% y el segundo a 22,1%, mientras que los indecisos llegan a 20,6%. El resto, 15,6% y más de la mitad de los inclinados hacia los independientes, asegura que no votará.
Los números muestran una realidad: el descalabro del chavismo se agudiza y se van reduciendo las opciones de triunfo de este bloque, pero la Mesa de la Unidad Democrática no termina de asegurar la victoria debido a que no crece.
“Está operando más un voto castigo que un voto a favor de algo. La oposición debe avanzar más en brindar sus propuestas específicas y debe aumentar su nivel de penetración social en las comunidades”, asegura Edgard Gutiérrez, Coordinador de Venebarómetro.
En la encuesta de junio, 48% de los entrevistados evaluó positivamente la labor de la MUD, un repunte de 4,3 puntos respecto a los números de mayo.
Por su parte, 27,4% calificó de “buena” la gestión del presidente Nicolás Maduro por el bienestar del país, la cual fue valorada como mala por 71,2%; 3,9 puntos porcentuales más que en mayo.
Los problemas del gobierno han influido negativamente en la popularidad del chavismo. 27,2% de los entrevistados se definió como “oficialistas” en junio; 5,8 puntos menos que en la últimas encuesta de mayo, cuando se ubicó en 33%.
Por primera vez en años este bloque pasó a ser la tercera fuerza del país. Está por detrás de la oposición, que tiene 35,9%, y de los neutrales, que pasaron de 24,3% a 30,7%.
Con información de El Nacional.