Al parecer es una práctica común: les descubren cuentas millonarias en bancos extranjeros y luego lo que sigue es negarlo totalmente y asegurar que nunca en la vida se ha puesto un centavo fuera del país. Pasa en Venezuela, pasa en todos lados, lástima que siempre estos actos de corrupción estén entrelazados y por algún lado salga a relucir el gobierno venezolano.
Tal es el caso del hijo de la presidenta Cristina Fernández, Máximo Kirchner, quien negó el martes tener cuentas bancarias en el exterior, según difundieron dos investigaciones periodísticas sobre supuestos negociados entre Argentina e Irán con la mediación de Venezuela.
“Nunca tuve ni tengo cuentas en el exterior, nada, absolutamente nada”, dijo Máximo Kirchner en diálogo con radio Continental. Fue la primera entrevista que concedió el hijo mayor de la mandataria y a quien se le atribuye una enorme influencia sobre el gobierno.
“Uno generalmente no desmiente este tipo de situaciones, pero me parece que por la misma gravedad de lo que se dice, Venezuela, Irán, uno no puede dejar pasar este tipo de situaciones”, sostuvo el joven, de 37 años.
La revista brasileña Veja publicó días atrás una investigación según la cual Irán pidió al presidente venezolano Hugo Chávez mediar ante el gobierno argentino para cerrar la causa judicial por el atentado contra un centro comunitario judío en 1994, que según la justicia argentina fue ejecutado por Hezbollah con apoyo de Teherán, y para acceder a uranio enriquecido en Argentina para su programa nuclear.
El medio sugirió que como parte del acuerdo Irán financió parte de la campaña electoral que llevó a Fernández a la presidencia en 2007.
Como un apéndice de esta investigación, el diario argentino Clarín publicó el fin de semana que Kirchner y Nilda Garré, la ex embajadora en Venezuela y actual representante argentina ante la Organización de Estados Americanos, fueron cotitulares en el 2005 de una cuenta bancaria no declarada ante el fisco en Estados Unidos y otra en un paraíso fiscal. Clarín también adjudicó a Garré dos en cuentas en el banco Tejarat de Irán en el 2011.
“Nadie me llamó, ni del medio brasileño ni de Clarín para chequear esta información”, aseguró Kirchner, quien encuadró la denuncia dentro de la añeja disputa que el gobierno de su madre mantiene con el Grupo Clarín, el conglomerado de medios más poderoso del país.
Con información de Runrun.es.