El escándalo de los «narcosobrinos» de la primera dama Cilia Flores sigue encendido. Todo parece indicar que los familiares de la esposa del presidente Nicolás Maduro negocian con la DEA para reducir la pena.
La decisión del juez del Distrito Sur de Nueva York Paul Crotty, en el sentido de otorgar un mes más a los defensores de los sobrinos de la familia presidencial, Franqui Flores de Freitas y Efraín Campos Flores, para evaluar las pruebas en su contra, reafirma la posibilidad de una negociación que conduzca a la admisión de culpa por el cargo de conspiración para traficar drogas hacia Estados Unidos.
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En términos oficiales, la comparecencia de Flores de Freitas y Campos Flores fue aplazada hasta el 29 de marzo, debido a una solicitud cursada el 25 de febrero por el defensor de Campos Flores, Kafahni Nkrumah, con el argumento de que se necesita más tiempo para empaparse de todo el expediente y planificar una defensa.
Esta ha sido la segunda prórroga concedida por solicitud del litigante. Fuentes conocedoras del caso indicaron que las pruebas entregadas al abogado, así como a los anteriores, se refieren no solo a los preparativos para el envío de 800 kilos de cocaína hacia EE UU a través de Honduras y México, sino también a otros cuatro traslados de menor cuantía, efectuados entre 2014 y 2015.
Los sobrinos de la primera dama fueron aprehendidos el 10 de noviembre de 2015 en Puerto Príncipe, Haití, por agentes de la División de Operaciones de Campo de la Agencia para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés). Supuestamente acudieron a esa isla con la finalidad de ultimar detalles sobre el envío del cargamento con un informante confidencial de origen centroamericano que trabajaba para la referida policía.
De forma extraoficial se indicó que la Fiscalía, a cargo de Preet Bharara, preparó una acusación sustituta en la que son referidos más de 70 elementos de prueba, reseñó El Nacional.
La solidez de los datos recabados hace pensar que durante las próximas semanas se adelante una negociación en la que Flores de Freitas y Campos Flores admitan su culpabilidad a cambio de una reducción de la pena prevista.
Amanecerá, veremos y no nos sorprenderemos de las justificaciones que invente el Gobierno para justificar una posible declaración culpable de los ejemplares sobrinos de Flores.