Digamos que hizo un buen negocio y recibió un dinero que no tenía en sus planes. Decide usar eso en regalarse un viaje, a conocer Europa como siempre soñó. Hasta ahí todo perfecto. Quiere irse a Madrid y cuenta con Bs. 500 mil para viajar.
Lo siguiente debería ser sencillo: va a comprar su pasaje y a buscar hospedaje, ¿no? Pues no, si usted vive en Venezuela.
Desde hace más de un año comprar un boleto aéreo en el país se ha vuelto una odisea. Desde altos precios hasta problemas con deudas del Estado a las aerolíneas han causado que un pasaje que hasta el año pasado se conseguía por 10 sueldos mínimos, hoy esté por las nubes.
Un pasaje a Madrid por Conviasa cuesta 430 mil bolívares. Recientemente, la misma aerolínea estatal habilitó la venta de boletos para Buenos Aires y a la capital de la “madre patria“, solo para cancelarlos una semana después dejando varados a sus pasajeros, reseñó El Cooperante a través de una nota en su portal.
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Aunque hubiese conseguido ese pasaje con Conviasa (y no se lo hubiesen suspendido), los 70 mil bolívares que le quedarían de sus 500 mil solo le servirían para comprar 100$ en el mercado paralelo, con lo que no pagaría ni los pasajes en su destino. A menos, claro, que obtuviera dólares por Cencoex.
Muchos excusan la situación en los llamados “raspacupos”, que viajan para traerse los dólares preferenciales y venderlos en Venezuela a precio de paralelo. Pero la situación ha afectado a quienes vienen de otros países, tienen familiares afuera o quieren hacer turismo.
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Pero hay maneras de conseguir los boletos. Por supuesto, más costosos. Diariamente corren publicaciones por redes sociales y servicios de mensajería instantánea ofreciendo pasajes que no es posible conseguir por canales tradicionales.
Parece que en Venezuela todo escasea, por lo que se ha creado un mercado paralelo para casi todos los rubros. Siempre hay alguien que te consigue el pasaje, la tarjeta de crédito del banco del Estado para que te aprueben el cupo viajero, y hasta el contacto en el país de destino para hospedaje y para “raspar”.
Los pasajes a Madrid se conseguían en mayo de 2014 en 47 mil bolívares, según revela a El Cooperante un revendedor, hoy pueden superar hasta el millón de bolívares, o en su defecto ser adquirido directamente en dólares, por un precio que oscila entre 1.000 y 1.200 de la divisa extranjera.
Volar a Roma, por ejemplo, pasó de costar 9 mil bolívares en 2013, a costar 50 mil en 2014 y 1600 dólares en 2015. Una muestra más de que la inflación se puede inferir aunque desde el Gobierno no quieran informarla.
“Hay lo que quieras, pero en dólares”
En las agencias de viajes responden lo mismo: En dólares sí hay para cualquier fecha. El costo de un boleto a Buenos Aires (Argentina) en dólares, por ejemplo, es de $ 1.350. Esto si se compra de inmediato, pues los costos aumentan días tras días y las agencias no asegura presupuestos.
El pago de los boletos en dólares debe hacerse con tarjetas de crédito o débito internacional. Los boletos disponibles en bolívares tienen restricciones por fechas, generalmente para viajes de 15 días. Un viaje a Guayaquil (Ecuador) puede costar 420 mil bolívares. De igual modo, no hay forma de reservar.
Por lo visto, le sale mejor usar sus ahorros para emprender un nuevo negocio, y si de verdad su deseo es irse de vacaciones, le recomendamos irse 15 días a Margarita. Pero el ahorro es relativo: Aunque está a menos de una hora de Caracas, en la isla se le pueden ir fácilmente 200 mil bolívares.