Yonny Eduardo Bolívar Jiménez, condenado por el homicidio de Adriana Urquiola, la interprete de señas de Venevisión asesinada el 23 de marzo de 2014 durante una protesta realizada en la carretera Panamericana, dentro de las series de acciones de manifestaciones públicas en contra del mandato del presidente venezolano, Nicolás Maduro, fue identificado en ese momento como escolta de Iris Varela.
Este jueves Maduro señaló en cadena nacional, en un acto contra la recién aprobada por la Asamblea Nacional, Ley de Amnistía, que el asesino de Urquiola trabaja como escolta del alcalde metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, quien fue detenido en febrero de 2015 y actualmente se encuentra en arresto domiciliario y es considerado uno de los presos políticos de Maduro, así lo reseña El Pitazo.
Bolívar Jiménez cumple una condena de 17 años, un mes y veinte día, el pasado 16 de enero de este año, tras ser acusado por el Ministerio Público por los delitos de homicidio calificado con alevosía por motivos innobles en perjuicio de Urquiola y el mismo delito pero en grado de frustración en detrimento de Rosalba Pérez (32), quien resultó herida durante el hecho.
“Arregló ascensores en el Ministerio”
Al momento de conocerse la identidad de Bolívar, en 2014, tras el asesinato de Urquiola, se rumoró que era escolta de la ministra para el Servicio Penitenciario, Iris Varela. Este señalamiento fue desmentido por la ministra, el 28 de marzo de 2014, aclarando que trabajaba para una compañía que repara ascensores y llegó a hacerlo en una de las sedes del Ministerio.
“Solo quiero la pena máxima”
La madre de Adriana Urquiola, Manuela Pérez, ha sido reiterativa en las condiciones que rodearon el caso de su hija y los juegos del poder de los que se valió Bolívar para escapar del país y mantenerse prófugo por 448 días hasta su detención en barranquilla, Colombia. Aún dos años después se desconoce si el “Capitán” tendría algún nexo con altas esferas del poder rojo que lo habrían ayudado en sus evasión de la justicia venezolana, logrando también que los tribunales y Fiscalía pasaran más de un año sin colocar sus datos en al alerta roja de Interpol a nivel internacional.
Pérez, señaló que desestima declaraciones sobre que la vinculan a ella con la aprobación de la Ley de Amnistía que “lo único que me interesa es que Yonny Bolívar tenga la pena máxima“.
Señalo que no ha tenido reunión oficial sobre la Ley de Amnistía siendo ella una de las víctimas, lo único que señala le interesa es la pena máxima destacando que el “dictamen refiere que Bolívar disparo para dispersar una manifestación”.
“No puedo cerrar la página y pasar este capítulo, No puede ser posible que se hizo un gran esfuerzo para que la Fiscalía hiciera una gran investigación y extraordinaria para una sentencia que no está acorde con el hecho. Este caso no ha quedado sin solución porque nosotros no lo hemos permitido ni permitiremos que quede así. Yo tengo la necesidad de ver una justicia verdadera, que no tenga otro adjetivo calificativo, Es una sola palabra no es plena o condicional, solo quiero justicia”, finalizó Pérez quien detalló que seguirá hasta lo último porque quiere la pena máxima para el asesino de su hija y nieto.
Prontuario de un delincuente
A través de redes sociales se conoció las implicaciones de Bolívar en hechos delictivos entre los que se señala que en el 2002 fue en el Centro de Barquisimeto a bordo de una Gran Cherokee en donde tenía gran cantidad de uniformes militares, poseía insignias, los uniformes con el apellido Bolívar.
El “Capitán Bolívar” había sido señalado por lavado de dinero y tráfico de drogas. Estuvo involucrado, con otras seis personas, en el decomiso de 110 kilos de cocaína en Felixstowe, Inglaterra.
Asimismo, Bolívar se hizo pasar por hijo de un general para obtener pasaporte diplomático. En el año 2003 participó en el plagio del economista Amado Pastor Gudiño, de 68 años. Fue capturado por el Cicpc y el Gaes y condenado a 23 años, 7 meses y 5 días de presidio por el Tribunal 4º de Primera Instancia en función de Juicio del estado Lara en 2003, pero la defensa del acusado apeló logrando bajar la condena a 22 años y 25 días.
Fue enviado a la cárcel de Uribana, Barquisimeto, en donde obtuvo el liderazgo comandando una de las masacres más grandes en donde hubo líderes decapitados fue trasladado a El Dorado peor por una medida de gracia salió en libertad.
Tras el asesinato de Urquiola
El día que Yonny Bolívar, asesinó a Adriana Urquiola, quien para el momento contaba siete meses de embarazo de un varón que se llamaría Alex Adrián, viajaba en una camioneta negra y portaba una credencial de la PNB de Bolívar se convirtieron dos meses después en datos claves en las pesquisas sobre el crimen de Urquiola. “El Capitán Bolívar” se dirigía hacia su residencia pero en el camino se encontró con la barricada, por lo que decidió disparar para dispersar a los encapuchados y abrir paso.
Pese a que el crimen fue adjudicado originalmente a un supuesto trabajador de Corpoelec, luego se conoció que el responsable fue Bolívar. La camioneta fue encontrada en un allanamiento del Cicpc realizado dos días después en el garaje de su casa, ubicada en el sector El Picacho de San Antonio de Los Altos.
Bolívar el día siguiente el asesinato de Urquiola habría declarado en la sala del Eje Homicidios del Cicpc Los Teques. Los sabuesos lo dejaron ir y días después se comprobó su presunta participación, que admitió luego el mismo “Capitán Bolívar” –tal como se le conoce luego de que en el año 2004 falsificara una credencial para hacerse pasar por efectivo de la Aviación ante los tribunales tras su captura en el mes de junio de 2015.
El 15 de marzo de 2004 fue condenado por el Tribunal Tercero de Lara por cometer el secuestro de un comerciante, ocultamiento de armas de fuego y de guerra, y la usurpación de título militar a 22 años de prisión en Uribana, y ordenó la confiscación de sus propiedades, incluyendo una lancha y dos vehículos. En esa oportunidad fue detenido por el entonces jefe del core 4, José Enrique González Arreaza, quien fue asesinado el pasado fin de semana en Caucagua.
Información de El Pitazo